El Reino de Dios y su Justicia
El Reino de Dios y su Justicia.
Bases Bíblicas y Profundización:
Reino de Dios:
No es una religión: Jesús no vino a fundar una nueva religión con dogmas y rituales, sino a establecer un reino espiritual dentro de los corazones de los hombres. Este reino se caracteriza por la justicia, la paz y el gozo en el Espíritu Santo. (Mateo 6:33)
En la tierra: Aunque tiene una dimensión celestial, el reino de Dios se manifiesta en la tierra a través de la vida de sus seguidores. Es un reino de poder, pero también de servicio y amor al prójimo. (Lucas 17:21)
Diseño de Dios:
Frutos del Espíritu: Gálatas 5:22-23 detalla los frutos que evidencian la presencia del Espíritu Santo en la vida de un creyente: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y templanza.
Dones Espirituales: Romanos 12 y 1 Corintios 12 enumeran diversos dones espirituales que el Espíritu Santo reparte a la iglesia para edificación mutua.
Ministerios: Efesios 4:11-12 habla de los apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros como dones dados a la iglesia para equipar a los santos para la obra del ministerio.
Las Siete Iglesias:
Apocalipsis 2 y 3 presentan cartas a siete iglesias que representan diferentes etapas en la vida de una iglesia.
Religión y Santidad:
Santiago 1:27 relaciona la verdadera religión con cuidar de los huérfanos y las viudas en su aflicción, y mantenerse sin mancha del mundo.
Influencia de Babilonia:
Apocalipsis 17-18 describe a Babilonia como una gran ciudad que representa el sistema mundial opuesto a Dios.
Profundización:
El conflicto entre el reino de Dios y el mundo: La historia de la iglesia es una constante lucha entre el reino de Dios y las fuerzas del mal.
La importancia de la unidad en el cuerpo de Cristo: A pesar de las diversas manifestaciones del Espíritu Santo, la iglesia es un solo cuerpo.
La necesidad de una reforma continua: La iglesia debe estar en constante proceso de renovación y reforma.
Conclusión: El mensaje central es que el reino de Dios es una realidad presente en el mundo, pero que se expresa de manera más plena en la vida de aquellos que han recibido a Cristo como Señor y Salvador.
Comentarios
Publicar un comentario